Postres caseros: Red Velvet

La historia de esta receta empezó a circular en Estados Unidos hacia los años 1920, donde supuestamente ya se servía en el restaurante del Hotel Waldorf-Astoria de Nueva York, aunque se desconoce su origen exacto. Según se dice, una clienta que ya la había probado llamó al hotel para preguntar por la receta y cuando se la enviaron, le llegó con acompañada de una factura desorbitada por lo que, como venganza, decidió hacerla pública.

Posteriormente, se cuenta que esta tarta apareció en la época de racionamiento alimenticio que se vivió durante la Segunda Guerra Mundial, donde los panaderos usaban jugo de remolacha  hervida para dar un toque de color a sus pasteles y mejorar su aspecto visual.

También se cuenta que años después, durante las décadas 40 y 50 del pasado siglo, la cadena canadiense de centros comerciales Eaton’s las vendías como algo exclusivo de sus restaurantes, hasta el punto de prohibir a sus empleados revelar la receta bajo juramento. Fuera cual fuese su origen, nosotros os proponemos una de sus tantas variantes, la que más nos gusta:

Ingredientes de la tarta

• 250 ml de leche entera
• 15 ml de jugo de limón
• 280 gr de harina de trigo
• 5 gr de levadura en polvo
• 5 gr de bicarbonato sódico
• 2 gr de sal
• 25 gr de cacao en polvo
• 350 gr de azúcar
• 150 gr de mantequilla
• 2 huevos batidos
• 15 ml de vinagre blanco
• 10 mg de extracto de vainilla
• 120 ml de café preparado
• 60 ml de colorante alimentario rojo

Preparación de la tarta

• Precalentamos el horno a 180º.
• Utilizaremos dos moldes redondos para tartas sobre los que frotaremos mantequilla con la ayuda de un pincel para cocina y espolvorearemos un poco de harina.
• Añadimos en un recipiente la leche con el jugo de limón y la dejamos reposar durante 15 minutos, hasta que la leche se vuelva agria.
• Mezclamos en otro recipiente la harina, la levadura, el bicarbonato, la sal y el cacao en polvo.
• En un tercer recipiente mezclamos el azúcar con la mantequilla y añadimos la leche agria del primer recipiente junto con los dos huevos batidos, el vinagre blanco, la vainilla, el café y el colorante hasta que quede todo homogéneo.
• Vamos añadiendo poco a poco esta última mezcla líquida al contenido del bol con la harina, la levadura, etc., que habíamos preparado anteriormente.
• Una vez mezclado, vertemos la masa en los moldes para tartas.
• Los metemos al horno a 180º durante unos 30-40 minutos.
• Cuando estén listos los bizcochos, los cortamos horizontalmente por la mitad.
• Luego cubrimos las partes superiores con la crema de queso que os explicamos a continuación, y después las apilamos unas sobre otras obteniendo un pastel en cuatro niveles.
• Finalmente, una vez hecha la tarta la cubrimos alrededor con más crema.

Ingredientes de la crema de queso

• 300 gr de queso cremoso
• 80 gr de mantequilla sin sal
• 10 ml de extracto de vainilla
• 450 gr de azúcar glas

Preparación de la crema de queso

• Mezclar el queso junto con la mantequilla.
• Añadir el extracto de vainilla.
• Añadir poco a poco el azúcar glas.

Como ya os hemos dicho, esta tarta tiene numerosas variantes como cambiar la mantequilla por aceite de oliva, e incluso de girasol; o utilizar buttermilk en lugar de prepararla con leche entera y jugo de limón. Nosotros hemos añadido a la mezcla café preparado porque creemos que le da un toque muy bueno, aunque la mayoría de recetas no lo llevan añadido. Y también entre las variantes más comunes está la de las cantidades que, por supuesto, tendréis que adaptar al gusto tomando estas como referencia, o el número y grosor de niveles que se apilan.

Esperamos que os haya gustado y que disfrutéis tanto comiéndola como haciéndola. ¡Un abrazo y hasta la próxima!

Artículo escrito por Thinking Lola