Cómo hacer un café Mocha
Moca es el nombre de una ciudad que se encuentra al borde del Mar Rojo en el país de Yemen, cerca de Etiopía, y que ya en el siglo XV era una de las mayores exportadoras de café de su país vecino principalmente hacia la Península Arábica, así como a algunos países de Europa. También hay una variedad de café, el café tipo Moca, que se cultiva en esta misma ciudad de la cual toma su nombre, y cuyos granos recuerdan a los granos de cacao por lo que es posible que esta sea la razón por la que se asociara el café moca con el chocolate, y que posteriormente diera lugar a la aparición de su mezcla. En todo caso y, aunque se puede llamar Café Moca al café expreso hecho únicamente con esta variedad de café, lo cierto es que la definición más extendida es la que os enseñamos a continuación:
Ingredientes
- Sirope de chocolate
- Café expreso
- Leche
- Azúcar al gusto
Preparación
- Añadir un poco de sirope de chocolate en una taza mediana.
- Preparar un café expreso y verter en la misma taza anterior.
- Calentar unos 125ml de leche con el vaporizador de la cafetera.
- Añadir con una cucharilla un poco de la crema de la leche sobre el café.
- Añadir suavemente la leche caliente en la taza hasta su borde.
- Se puede decorar por encima con un poco de chocolate en polvo.
Este café se puede hacer con chocolate negro, con leche o blanco, llamándose esta última variante “moca blanco”. También se puede usar chocolate en polvo en lugar de sirope, que mezclaremos con agua o leche caliente para que se espese un poco, e incluso se podría calentar leche en un recipiente al fuego y añadirle un trocito de chocolate en pastilla para postres, con lo que el sabor a chocolate será mucho más intenso. Como vemos, la diferencia con el Capuchino es que el Moca lleva chocolate; y la diferencia con el Vienés es que el Moca no lleva nata.
Esperamos que a partir de ahora podáis disfrutar de este delicioso café, que es el complemento perfecto para acompañarlo con un postre bien cargado de felicidad. ¡Hasta la próxima!
Artículo escrito por Thinking Lola