Diferencias entre café Arábica y Robusta

Aunque son muchas las especies de café existentes, son principalmente dos las que son plantadas en el mundo para su consumo a nivel comercial: el café Arábica y el café Robusta, de las que seguramente hayáis oído hablar muchas veces pero sin saber lo que son exactamente.

Pues bien, la variedad Arábica es originaria de Etiopía aunque se cultiva en otros países como Kenya, Guatemala o Colombia. Su café tiene una baja concentración de cafeína, de entre el 1 y el 1,5%, y una acidez alta; son cafés con menos cuerpo y un paladar más suave y delicado, apareciendo a menudo en ellos notas afrutadas o achocolatadas. Su planta crece en altitud y a temperaturas medias, es más pequeña que la de los cafés Robusta y mucho menos productiva, así como menos resistente a las enfermedades lo que en conjunto hace que su precio sea mayor que el de otras variedades. Podríamos decir a grandes rasgos que es un café de una calidad superior al resto.

Por otro lado tenemos el café Robusta, originario de África Central y cultivado en países como Brasil o Vietnam. Su café tiene el doble de concentración de cafeína que el Arábica, de entre el 1,5 y el 3%, y una acidez baja; son cafés con mucho cuerpo y un paladar amargo y poco perfumado, utilizándose a menudo para mezclarlo con variedades de más calidad y conseguir cafés equilibrados. Su planta crece en climas secos y calurosos de baja altitud, y es más grande y productiva, así como más resistente a las enfermedades que la variedad Arábica, lo que hace evidentemente que su precio sea considerablemente más económico que el de otros cafés. Como idea general podríamos decir que es un café de una calidad inferior al resto.

Pero como hemos dicho, el café Robusta suele usarse en su mayoría en mezclas para aportar cuerpo y robustez al café Arábica que, junto con la suavidad aromática y la elegancia de éste último, pueden dar lugar a cafés de una muy buena calidad en su conjunto.

Esperamos que hayáis aprendido algo después de esta lectura y que os haya picado la curiosidad por leer nuestro siguiente artículo. ¡Un saludo cafeteros!

Artículo escrito por Thinking Lola