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Diferencias entre café natural, torrefacto y mezcla

Alguna de las muchas palabras que a menudo habremos escuchado en torno al café son las de natural, torrefacto y mezcla; sobre todo la de natural, ya que cuando no lo es no suele especificarse, o bien viene marcado con letra muy pequeña en una parte casi invisible de la etiqueta. Para que nos quede clara la idea, la diferencia está en el proceso de tueste.

Un café natural es aquel que se tuesta exclusivamente aplicando calor, es decir, sin añadir otros elementos aditivos. De esta forma, los granos de café cambian de color del beige claro al marrón almendra y mantienen todo su sabor y aroma, pudiendo apreciar sus matices más sutiles en nuestra taza. Es por eso que para este tipo de tuestes suelen utilizarse cafés Arábica, que son cafés de una calidad alta, suaves y con una fineza aromática muy característica.

El café torrefacto es aquel al que se le añade azúcar durante su proceso de tueste, hasta un máximo de un 15%. En este caso, al caramelizarse el azúcar por el calor los granos de café son recubiertos de una fina capa que les proporciona una estética brillante y un color marrón oscuro característicos, por lo que visualmente ya tenemos la primera diferencia con el café de tostado natural. Una vez en taza también es un café mucho más amargo, de un color negro muy intenso y con una crema muy oscura, más voluminosa pero menos densa, artificial. Debido a que el azúcar enmascara los verdaderos aromas del café, para este tipo de tuestes suelen utilizarse cafés Robusta, de menos calidad pero más baratos.

Finalmente tendríamos el café mezcla que, como bien se intuye de la propia palabra, es una mezcla con una parte de cada uno de los dos cafés anteriores, natural y torrefacto, habitualmente con porcentajes de un 80% y 20%, respectivamente, aunque la mezcla puede variar.

En definitiva y, a modo de resumen, el mejor café e incluso el más saludable será el de tueste natural hecho con café Arábica 100%.

Esperamos que os haya quedado un poco más claro y que sepáis diferenciar a partir de ahora qué café estáis tomando. ¡Hasta el próximo artículo!

Artículo escrito por Thinking Lola

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