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Postres caseros: Galletas de jengibre

Se cree que el jengibre, originario de Asia, pudo ser introducido en Europa por las cruzadas que volvían de los países del este del Mediterráneo en el siglo XI. Unos siglos más tarde, en la Edad Media, las galletas de jengibre se hicieron muy populares sobre todo en festivales y ferias de Inglaterra y Francia, donde se elaboraban con formas de flores, pájaros, animales e incluso armaduras.

La más distintiva y conocida es la típica galleta en forma de hombrecillo, que las mujeres regalaban a sus caballeros favoritos como amuleto para que les diera suerte en los torneos, o que se comía supersticiosamente como si fueran un “marido de galleta” que aumentaría su suerte para conseguir uno. Pero la primera vez que estas galletas aparecen referenciadas con forma humana es en la corte de Isabel I, donde se dice que las regalaba a las visitas importantes con una forma parecida a ella misma.

También en Alemania fueron muy populares, donde la tradición era regalarlas en forma de corazón y con decoraciones que contenían frases de amor escritas. Hoy en día son quizás el dulce más típicamente navideño en Europa y Norte América, pudiéndolas encontrar en cualquier mercado callejero durante esas fechas. Para su elaboración necesitaremos:

Ingredientes

  • 250 gr de harina
  • 100 gr de azúcar moreno
  • 5 gr de bicarbonato sódico
  • 5 gr de canela molida
  • 5 gr de jengibre en polvo
  • 2 gr de nuez moscada
  • 2 gr de sal
  • 1 huevo batido
  • 150 gr de mantequilla
  • 80 ml de miel

Preparación

  • Precalentar el horno a 180º.
  • Para evitar que la masa se pegue, pondremos papel de horno sobre la bandeja que luego meteremos.
  • Mezclamos en un recipiente la harina, el bicarbonato, la sal y el resto de las especias.
  • En otro recipiente mezclamos el azúcar moreno y la mantequilla.
  • Añadimos poco a poco el huevo batido a este último bol.
  • Después añadimos en el mismo la miel, y removemos bien.
  • Por último mezclamos el contenido de ambos recipientes batiendo hasta que quede una masa homogénea.
  • Espolvorear un poco de harina sobre una superficie plana y amasar.
  • Luego aplastamos la masa hasta que nos quede una plancha fina, de medio centímetro aproximadamente.
  • Con moldes de diferentes formas vamos recortando figuritas.
  • Las colocamos sobre la bandeja de horno.
  • Calentar a 180º durante 15-20 minutos.
  • Al sacarlas del horno no os preocupéis si las galletas salen blandas, pues se endurecerán al enfriarse.

Las galletas de jengibre se pueden decorar añadiendo chocolate blanco por encima. También se pueden decorar mezclando clara de huevo batida a punto de nieve con azúcar glas, un poquito de zumo de limón y colorante alimentario; otra opción es comprar el glaseado ya preparado, o decorar con caramelo.

Seguiremos compartiendo nuestras recetas favoritas con vosotros así que, ¡no dejéis de leernos!

Artículo escrito por Thinking Lola

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